
Como resulta lógico, cualquier tipo de régimen represor que limita la salida de los ciudadanos de su territorio acaba viendo surgir grupos opositores clandestinos que tratan de ayudar a huir hacia otros lugares a aquellos que se sienten oprimidos. Ejemplos de ellos ha habido muchos en la Historia y, aunque a priori cualquiera pudo servir de inspiración para “Mayday”, hay ciertos elementos que indican que el principal referente es el “ferrocarril subterráneo”. Esta organización, que tenía como principal cometido permitir la huida de los esclavos negros de los Estados Unidos, se desarrolló desde principios del siglo XIX hasta el año 1865, cuando tras el fin de la Guerra de Secesión la esclavitud es oficialmente abolida. Aunque la jerga ferroviaria que empleaban sus miembros -y que acabó dándole nombre- no se usa en “Mayday”, si hay algunos elementos que hacen evidente la vinculación entre ambas, como el hecho de que las rutas de escape sean muy similares, puesto que los puntos de origen eran los mismos y el destino final en ambos casos era Canadá: en el siglo XIX debido a una abolición más temprana de la esclavitud en aquella colonia británica, y en el caso de la distópica Gilead, porque los canadienses acogieron a buena parte de los emigrados por razones ideológicas -de hecho, allí se establece una gran colonia bautizada como “Little America”-, y desde un primer momento el gobierno de ese país se opuso al nuevo régimen de su vecino del sur. Asimismo, y aunque oficialmente en Gilead la esclavitud como tal no se reconoce, a efectos prácticos es un estado policial en el que no existe la libertad para la mayor parte de la población, y la situación de las “criadas” se puede calificar sin duda alguna como de esclavitud, al no ser dueñas de su propia existencia y deber obediencia absoluta a sus comandantes.
Debido a que el argumento está más desarrollado que en la novela original, desconocemos cómo evolucionarán los acontecimientos en las siguientes temporadas -el rodaje de una tercera ya está confirmado- y si habrá nuevas referencias a elementos históricos, aunque no sería extraño, debido a que, como comprobamos siempre en El Octavo Historiador, al final el pasado siempre acaba siendo una fuente inagotable de ideas y referentes, para lo bueno y para lo malo.
Imagen de portada extraída de cinergiaonline.com